La mejor carne para hacer una barbacoa o parrillada
Se acerca el buen tiempo, y con él los planes de tardeo con cena en la calle. Uno de los mejores planes que se pueden hacer en esta época del año, para compartirlos con familia y amigos, son las barbacoas o parrilladas. Pero ¿cómo saber cuál es la mejor carne para barbacoa? En MM Salamanca sabemos que no todos saben elegir la carne para hacer a la parrilla, así que en este post te damos las claves para que puedas hacerlo ¡y quedes de lujo!
¿Qué tener en cuenta al elegir carne para barbacoa?
Antes de escoger la carne, hay que tener en cuenta algunos aspectos para estar seguros de que no nos vamos a equivocar. Y es que no basta con pedir “carne para barbacoa”, sino que tenemos que tener muy claro qué queremos conseguir para pedir la carne apropiada.
La importancia del tipo de corte
Elegir el corte adecuado es fundamental para el éxito de una barbacoa. Algunos cortes son más valorados por su sabor y textura cuando se cocinan a la parrilla. Cada tipo de carne tiene unas características únicas de cocción, y conocerlas permite seleccionar el tipo de pieza ideal según el tiempo de cocción, el tipo de parrilla y las preferencias de los comensales.
Grasa y marmoleado: el secreto del sabor
La grasa intramuscular, conocida como marmoleado, es clave para una carne jugosa y sabrosa. Al derretirse durante la cocción, aporta suavidad y potencia los sabores naturales de la carne. Un buen equilibrio entre carne y grasa garantiza una experiencia de barbacoa más rica y placentera. Evita cortes excesivamente magros si buscas jugosidad y sabor.
Origen y frescura de la carne
La procedencia de la carne influye en su calidad. Carnes de animales alimentados de forma natural suelen tener mejor sabor y textura. Además, la frescura es esencial: una carne bien conservada, con buen color y sin olores extraños, asegura una cocción segura y resultados deliciosos. Siempre que sea posible, elige proveedores de confianza y carne de producción local.
Cortes de ternera ideales para la parrilla
Cuando vamos a hacer ternera a la parrilla, una de las principales dudas es si todos los cortes son aptos para este tipo de cocción. A continuación te contamos cuáles son los más valorados.
Chuletón
El chuletón es uno de los cortes más apreciados para la parrilla. Es una pieza gruesa que incluye el hueso de la costilla, lo que aporta un sabor profundo y una cocción más jugosa. Su marmoleado lo hace ideal para una cocción a fuego medio-alto, ya que provoca en la pieza final una costra dorada por fuera al mismo tiempo que un interior jugoso. Es perfecto para quienes buscan un corte con carácter y sabor intenso.
Entrecot
El entrecot proviene del lomo alto deshuesado, y es más tierno que el chuletón, pero está al mismo nivel en sabor. Se caracteriza por un perfecto equilibrio entre grasa y carne magra, así que es ideal para asar a la parrilla en cortes de unos 2 o 3 centímetros de grosor. Se cocina rápidamente, y ofrece una textura suave y jugosa. Se trata de una opción versátil que gusta tanto a los paladares clásicos como a los más exigentes.
Las mejores piezas de cerdo para barbacoa
La carne de cerdo es una de las opciones más recurrentes para hacer en barbacoa. Te contamos cuáles son las mejores piezas.
Secreto
Este corte es uno de los más valorados por su jugosidad. El secreto se encuentra entre la paletilla y la panceta, y destaca por su veteado de grasa, que potencia el sabor de la pieza. Para asarlo a la parrilla y que quede en su punto, hay que hacerlo a fuego medio alto durante pocos minutos. De esta forma, se consigue una textura tierna y un sabor intenso.
Presa
La presa, dentro del cerdo, está ubicada entre el lomo y la paleta. Se trata de un corte tierno y con un excelente marmoleado que, gracias a su equilibrio entre grasa y carne, es el corte ideal para barbacoa. Se puede cocinar entera o en medallones, pero en ese caso hay que tener cuidado de no sobrecocerla, para que mantenga su jugosidad.
Panceta
La panceta o tocino es una carne que, si se cocina bien, queda crujiente por fuera y suave por dentro. Es un corte rico en grasa, por lo que es ideal para cocinar a fuego lento. Este tipo de cocción hace que la pieza se haga sin resecarse. Puede servirse en tiras, en filetes o enrollada.
Costillas
Las costillas de cerdo son un clásico a la parrilla. Necesitan una cocción lenta para quedar tiernas y sabrosas, pero también pueden marinar para potenciar su sabor. Son una de las piezas más valoradas para hacer barbacoas.
Chorizo fresco y criollo
El chorizo y el criollo son dos piezas imprescindibles en cualquier barbacoa. Se cocinan lentamente, para que suelten su grasa y se doren sin romperse. En cuanto a su sabor, se caracterizan por tener un sabor especiado y jugoso, y son una excelente opción como entrante o como acompañamiento en cualquier parrillada.
Cordero y pollo: opciones sabrosas para variar
La carne de cordero y de pollo son dos opciones alternativas, que permiten dar un toque extra a tu parrillada sin renunciar al sabor: potenciándolo.
Chuletillas de cordero
Las chuletillas de cordero son una opción tierna, jugosa y muy sabrosa. Se cocinan rápidamente a fuego medio-alto y no necesitan mucho más que sal gruesa y unas hierbas aromáticas, como romero o tomillo. Su grasa se funde durante la cocción, aportando un sabor intenso característico. Son ideales para las personas que prefieren comer piezas más pequeñas.
Muslos y alitas de pollo
Tanto los muslos como las alitas son cortes muy agradecidos en la parrilla. Los muslos ofrecen carne jugosa y sabrosa, especialmente si se marinan previamente con especias, ajo, limón o yogur. Las alitas, por su parte, son perfectas para cocinar a fuego miedo, consiguiendo una piel crujiente y un interior tierno. Aceptan una gran variedad de aliños y son un éxito seguro entre los comensales.
Hamburguesas a la barbacoa, ¡imprescindibles!
Las hamburguesas son una opción infalible en cualquier barbacoa, ya que son un tipo de carne para todos los gustos gracias a su facilidad de personalización. Además, a la parrilla adquieren un sabor ahumado irresistible que las distingue de las cocinadas a la plancha o en la sartén.
Consejos para preparar y cocinar carne en barbacoa
A continuación te damos una serie de consejos para cocinar carne a la barbacoa o a la parrilla.
Lo más importante es sacar la carne con tiempo, dejando que repose a temperatura ambiente entre 30 y 60 minutos. Esto hará que se cocine de manera más uniforme, evitando que se quede fría por dentro.
Antes de colocar la carne en la parrilla, asegúrate de que las brasas estén bien formadas. Te recomendamos tener dos zonas diferenciadas de calor en la parrilla: una directa con fuego fuerte y una indirecta con calor moderado para terminar la cocción sin quemar.
No pongas todas las piezas a la vez en la parrilla, debes dejar espacio entre ellas para que la cocción sea uniforme.
Utiliza la sal adecuada. Para este tipo de cocción es recomendable utilizar sal gruesa o en escamas, para realzar el sabor de la carne sin invadirlo. Además, elige el momento adecuado para salar la carne: justo antes de poner la carne al fuego o después de sellarla.
Al finalizar el asado de la carne, deja que repose entre 5 y 10 minutos antes de cortarla. Eso aportará una mejor textura y sabor.